viernes, 3 de febrero de 2012

Entre el pecado & el delito***

Junto a mi almohada ahogo mis lágrimas, 
susurrando muy despacio nuestra oración con fervor
en medio de mi inconsolable agonía. 
Ven a iluminar mi espacio
con tu sonrisa añorada.

Cántame al oído...
Arrúllame despacio.
Acógeme en tus brazos.
Explórame con besos
la curva de estos labios fisurados
por extrañar tu contacto.
Préstame tu pecho para extender mi cabello.
Escuchando tus latidos,
absorbiendo tu respiración muero por contarte mi sueño.

Acá estoy…
Divagando mis pensares,
elucubrando… y deshojando mi sentir
entre el pecado y el delito:
el pecado de hoy amarte sin que la cordura me acompañe.
El delito de adorarte a solas
y en medio de esa soledad buscarte a ciegas
hasta el desquicio de la razón.

Acá me tienes...,
entre el pecado de desearte noche a noche
en la que sólo se cuela
tu esencia entre las sombras…
y el delito de añorarte
sin que algún ente nocturno habitante en tu alcoba
me traiga si quiera tu voz como respuesta

Si amarte limpiamente es catalogado delito,
me confieso delincuente,
alma transgresora y reincidente.

Si amarte es pecado,
pecadora confesa he sido
desde que mi voz te cantó al oído.

¿Cómo decirle a mis ojos que no te lloren
si sin la luz de los tuyos sólo ven el abismo inmenso?

¿Cómo pedirle a mi cuerpo que no te espere
si en cada pliegue de piel
está tu nombre gimiendo fantasías
y delineando censurables poesías?

¿Cómo no amarte,
si cada latido…
es un te amo incontenible
que se hace eco repetido
en los confines de nuestro cielo?

Entre el pecado y el delito me encuentro
porque te espero,
porque aún te sueño febril y ansioso,
acobijado en mi cuello,
adormecido en mi pecho besando mis senos.

Entre el pecado del deseo y el delito de amar lo inhibido
hoy me rindo...
y permiso tienes tú
de atarme a tu cárcel e infierno prohibidos.

Mayra Bevilacqua
Enero 23-29, 2012

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