martes, 21 de febrero de 2012

Bailaría desnuda*****

Bailaría desnuda para acalorar tus ganas
entre tules transparentes y velos de terciopelo y organza 
para atraer tu atención,
fijar tu mirada en mi rostro, mi pecho y mis glúteos.
Bailaría desnuda para imantarte a mis caderas y mi pubis.
Ése que degustas cada vez que te apetece,
ése cuyas mieles saboreas cada vez que te provoca.

Te haría sudar sin siquiera tocarme...
Tan sólo con acercarme a tu boca y en un susurro decirte:

«Dame tu hervor.
Del agua de tu boca yo quiero beber.
En tu lengua sabia e inquieta me quiero perder...
Yo quiero, príncipe gladiador, que me hagas el amor».

O quizás bailaría en un diminuto hilo rojo
como estrella de cabaret frente a tus ojos
para. a fuego lento, alborotarte la sangre.
Ésa que se ha dormido, pero aún te corre por las venas.
Ésa que brota caliente como volcán
cada vez que con suavidad o con fuerza me besas,
y al marcar tu territorio
te acercas, me respiras, te impregnas de mi aroma y me tomas.

No hay alhajas que me quiten el sueño;
No hay presencia de rosas
que me halaguen el ego.
Con pétalos y claveles,
erótica y sensualmente, si gustas,
ven y cubre las vergüenzas de mi cuerpo.

Ven a deshojarlo.
Ven a poseerlo.
No pierdas tiempo.
Ven a plasmar tus manos
llenas de amor y sentimiento.
Desbórdate en caricias
y esconde en mí tus besos.

Hazme luz, sol… llama.., lumbre.
Enciende conmigo la hoguera de tu cuerpo.

Bailaría desnuda cual Diana, Artemisa, Venus o Minerva.
Haría que detrás de mí se arrastrasen tus pupilas cansadas
en busca de luciérnagas que aticen tu morbo y tu lujuria.

Bailaría desnuda vestida de ángel tentación,
Provocación irresistible.
Fruto provocador que eleva tu sangre
y desborda los límites de tu pasión.

Transfórmame en tu esencia…
Tu delirio… Vertiente de tu caudal y río…
Ola salada de tu mar…
Paz y sosiego de tu océano infinito.

Bailando desnuda…
hazme el amor
hasta que tiemble el cielo
y calle el trino de las aves.

Bailando desnuda…
Conviértete en fuego
con mi piel deslizándote entre tus dedos.

Desviste tu piel de pecado
y conviérteme en tu sacra santidad
embriagándote de mí.

Hazme el amor hasta reventar un grito hecho eco
y se abran las nubes en el cielo
para dar paso a la resurrección y al silencio.

Mayra Bevilacqua
Febrero 14-18, 2012

© Copyright 2012
All Rights Reserved

No hay comentarios.: