domingo, 7 de agosto de 2011


El silencio me habla en lo claro del cielo.
Siempre callo porque sueño, y hablo sin sonidos.
Al fin podrán salir los sueños por que lo que veo.
Al fin podrán salir los versos contenidos.

Diré que estás ausente, cuando estás casi muerto;
diré que tu silencio nos sigue acompañando,
pues, todos desconocen que callas porque es cierto;
que niegas el presente, que sigues aun soñando.

Libera ya tu llanto, que en él puedas curarte,
que griten tus lamentos, para poder salvarte,
que tu mano se detenga cuando quieras matarte,
que puedas ya en silencio, tu dolor sanarte.

Que nazcan otros sueños, en tu abdomen dormido,
que surgan mas ensueños en tu mirada clara,
pues nadie sabe tanto de ti, como tu dama blanca,
que nada tiene tanto de ti como su cara.

Liberate en su llanto, que azota y que castiga,
silencios desangrados, penares escondidos,
dejala ser la fuente que bañe tu fatiga,
y duérmete en su frente, que sola está... contigo.

DDV.
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