Quiero tu sexo bailando en mi cuerpo.Tu boca dame en un beso prohibido.
Quiero tu lengua humedeciendo mi pecho
como la llovizna de Junio que aún no cesa.
Deseo tus dedos hurgándome por dentro...
… escribiendo versos blancos en el suave manto de mi piel sin tiempo.
Amalgámate a mi cuerpo…
Fúndete completo,
como chocolate a fuego lento…..
Como las fresas y el chantilly:
acidez y dulzor degustadas tras la cata de un buen vino.
Y cual si fuere tu delito culposo,
disfrútame a cuenta gotas;
sin delirios y sin paciencias rotas.
Conviérteme en tu más íntimo ensueño,
lejos de tus temores, elucubraciones, miedos e infiernos.
Conjuga el Verbo AMAR
en el que su tiempo sea este Presente eterno
mientras deshojas papiros y pergaminos en mi vientre.
Quiero tu hondo gemido hacerlo mío,
mientras el clímax hace un festín de néctares en nuestros cuerpos
y un Amén se eleva hasta el Edén.
Quiero hacer mío tu éxtasis,
tu sudor, tu temblor.
... Y yo quiero ser la razón de tu secreto mejor guardado....
Tu santo pecado.
Santo Pecado mis besos
que te arropan por completo.
Santo Pecado el aroma latente en mí
que te embriaga… que te subyuga
y renueva tus ganas por tenerme
en cada pugna que libras con tu almohada en tus madrugadas.
Pecado mis aguas y mi sudor que los sentidos te envuelve.
Pecado mi tesoro más preciado.
Benditos tu hambre y tu apetitito por el calor de mi carne.
Conviérteme en tu Santo Pecado…
Borra de mí el pudor.
¡Hazme el amor!
No importa si en nuestra exaltación,
cantan los ángeles allá en el cielo
y se silencia a más de un ruiseñor.
Mayra Bevilacqua
Junio 25-26, 2011
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